El caso de una pequeña de siete años, sí, aunque difícil de comprender, pero de tan solo siete años que el 11 de febrero fue plagiada, torturada, abusada sexualmente y asesinada en un barrio del sur la Ciudad de México trastocó las conciencias de millones de mexicanos, literal millones.
Días después, el sábado 15, el cadáver de Fátima Cecilia Aldriguett Antón fue hallado en bolsas de basura, caso que junto al de Ingrid Escamilla se han convertido en el último símbolo de indignación de un país que cada día rompe los récords de la tragedia y que sin duda debería obligar al Gobierno de México a tomar medidas urgentes sobre la violencia que vive el país, principalmente nosotras, las mujeres.
De acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, durante el período de enero - diciembre del año pasado, la CDMX presentó números preocupantes de violencia contra la mujer:
- Tercer lugar nacional con 68 presuntos feminicidios y una tasa de 1.44% x cada 100 mil mujeres.
- 11 de sus alcaldías se ubicaron entre los 100 municipios de mayor incidencia de violencia.
- Primeros lugares en el delito de trata de personas, hostigamiento sexual, violación y en violencia familiar.
- Tercer lugar en llamadas de emergencia con 3 mil 813 registros.
Las cifras son alarmantes, pues en lo que va de este año, se lleva un registro de 265 feminicidios en todo el país. Y con el asesinato de Ingrid Escamilla y de la pequeña Fátima Cecilia no solo son un dígito, sino dos vidas y la estabilidad de toda una nación. Una realidad en la que tristemente vivimos, sumergidas en crueldad e indolencia, la ineficiente aplicación de protocolos y la percepción de impotencia.
La pequeña Fátima e Ingrid se sumaron a la larga lista de mujeres víctimas de feminicidio en México. Y con ellas, recordamos algunos de los casos más recientes como son los de Mara Castilla, asesinada por un chofer de Cabify en Puebla; Lesvy Berlín, cuyo cuerpo fue hallado en Ciudad Universitaria; Abril Pérez, quien sobrevivió a un ataque brutal de su esposo, a quien un juez dejó libre, entre muchas otras.
Por Fátima, Ingrid, Mara, Lesvy, Abril y las miles de mujeres que fueron asesinadas, nos vamos a mover, vamos a salir a las calles de manera pacífica y nos vamos a sumar a la #CadenaFeministaMX en todo México, con el objetivo de visibilizar y decir ya basta a todas las violencias en contra de niñas y mujeres, sin banderas institucionales o partidistas.
De igual forma, el día 9 de marzo desde Mujeres en Movimiento nos vamos a unir al Paro Nacional De Mujeres, que sin duda, será el movimiento con mayor impacto social en el país de este año. Sentirán nuestro silencio. ¡El 9 ninguna se mueve!
¡Es por Fátima, es por Ingrid, es por todas… #EsPorNosotras!
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